ORBITA HUAMALIANA

Domingo, 3 de junio 2018
 EDITORIAL
La Huelga no es la soluciòn

Una facción radical del Sutep anuncia el inicio de una huelga nacional para el 18 de junio bajo el argumento de que el Estado no ha cumplido los compromisos asumidos el año pasado.
Esa es una medida de fuerza que no se justifica porque no es realista, no es oportuna ni inteligente. Además el país y sobre todo los niños necesitan la dedicación del maestro para que aprendan más y conozcan de sus mayores, en particular de sus maestros, la práctica de los valores y la ética en la educación pública.

Pese a las dificultades ha habido un esfuerzo del Estado para mejorar las condiciones laborales y los sueldos de los docentes. Se sabe que todavía falta mucho para darle al profesor de aula lo que realmente merece, pero dadas las condiciones de nuestra economía y las malas administraciones gubernamentales, ese objetivo aún no se ha cumplido.
Sin embargo, tratándose del interés superior del niño, no es la hora de abandonar a los alumnos como se hizo el 2017, donde en varias regiones la huelga duró dos meses, y el perjuicio a nuestros niños, niñas y adolescentes fue irreparable porque las clases perdidas jamás se recuperan.
De modo que no le hagamos más daño al futuro de la patria debiendo un dirigente sindical sensato y sabio agotar los canales de diálogo y negociación. Lamentablemente parece que esas cualidades de liderazgo no las posee el dirigente Pedro Castillo, dizque líder de algunas “bases regionales” donde se agazapan agitadores profesionales y oscuros rezagos de la subversión infiltrada en la educación, tal como sucedió entre los años setenta.

Lo más grave es que detrás de ese anuncio del inicio de una huelga, planteada desde una facción del Sutep, está en la existencia de una antigua disputa en el seno de ese gremio de docentes, lo cual corrobora una división irreconciliable entre las citadas bases regionales y determinadas cúpulas de Patria Roja.
Hay, pues, una crisis dentro del otrora poderoso Sutep, complicada cuando son cada vez más los maestros que apuestan por la modernidad, su capacitación y su preparación dentro de la carrera magisterial, por lo que no se debería hacer una huelga buscando medir fuerzas frente a otras corrientes sindicales del gremio docente.
El país, los niños y las aulas no están para esta clase de experimentos de fuerza en medio del cual se ciernen ambiciones personales y estrategias subalternas para catapultar el liderazgo de unos pocos que tienen otra clase de objetivos, incluso electorales
FUENTE: Expreso