Prolijo
educador huamaliano, nació el 10 de Setiembre de 1921, sus estudios primarios
lo hizo en la prestigiosa Escuela de Primaria de Varones nro. 381 de Llata, la
secundaria en el Leoncio Prado de
Huánuco y Nuestra Señora de Guadalupe de Lima, los estudios superiores en el Guzmán
y Valle “La Cantuta”, post grado en la Universidad San Pedro Abad del Cuzco,
especialización en administración educativa en UNMSM.
Provenía
de una familia con rasgos congénitos similares, pues los hijos del llatino
Filomeno Córdova y María Alvarado destacaron por esas bondades polifacéticas, autodidactas, inventores,
artistas, escritores, pintores, músicos, teatro, etc. Neptalí reconocido
educador dedicó toda su vida a una
escuelita primaria que por desdicha hoy lleva otro nombre, David otro maestro de grata recordación, Arturo un
polifacético y apasionado artista.
Se
inició como educador en la zona rural de Huánuco siendo su primer centro de
trabajo Pachas, luego en 1951 llega al
hospitalario pueblo de Huallanca para
desempeñarse como director de la escuelita fiscal donde realizó una labor fecunda,
posteriormente en la década de los 60 es trasladado a Huariaca Pasco, a Los
Molinos en Pachitea, por concurso público ingresa como docente a la escuela
Normal Mixta Marcos Durand Martel, luego al Instituto Pedagógico Herminio
Valdizán. Al pasar al retiro como educador se desempeñó en otros cargos públicos entre ellas regidor
de educación y cultura en la
Municipalidad Provincial de Huánuco. Como vemos don Raúl tuvo una
formación sólida pues se inició en la
antigua universidad de Huánuco la
escuela Pre-381, Leoncio Pradino y Guadalupano a su vez, su trayectoria larga y
efímera.
Lauros
y logros : Medalla de oro al primer puesto en el colegio Guadalupe, mereció las
Palmas Magisteriales y Laureles Nacionales (1991), colaborador en la revista
pedagógica “Nuestra Educación”, “Tribuna de los Jóvenes”, en una columna del
diario La Prensa, publicó libros, revistas y folletos pedagógicos en los
diversos centros educativos que laboró.
Huallanca, recuerda con mucha gratitud al Maestro Raúl
Córdova Alvarado, pues a su paso por
este pueblo dejó huellas; visionario educador se adelantó al tiempo cuya pedagogía
hoy se aplica en la educación moderna. Resaltar su labor será de grata recordación para muchos
huallanquinos quienes tuvieron la suerte de ser sus alumnos, recibir sus motivaciones y reprimendas. Fue maestro
constructor de hombres, polifacético, autodidacta en muchas disciplinas,
taxidermista, curtidor de pieles, pintor exquisito, ebanista, escultor,
agricultor, escritor, fotógrafo, poeta, deportista, bordador, artesano creativo.
Durante su gestión la escuela Pre vocacional 393 de Huallanca ésta era una fabrica de manualidades tenía un
periódico “La voz del 393”, una banda de guerra con algunos instrumentos
construidos por los alumnos, estandartes
e insignias bordados en el taller, huerto escolar, zoológico, minipiscigranja,
talleres de mecánica, imprenta, carpintería y artes, salón de teatro, estatuas
de héroes, pinturas, animales disecados con fines didácticos; los desfiles
escolares eran ocasión para mostrar creatividad del plantel y culminaban con globos aerostáticos, en lo
deportivo la 393 estuvo en la vanguardia
de las disciplinas deportivas.
Hay
un dicho “Nadie es Profeta en su tierra”, si efectivamente Llata no tuvo la
suerte de gozar de las cualidades de su
hijo, pues su apostolado lo hizo afuera, y muy temprano el infausto destino nos quitó a Raúl en cuerpo y alma ( 15 Feb. 1997 ) sus restos
yacen en el cementerio de Huánuco; pero que mejor epitafio para la comunidad llatina-huallanquina ver
perennizado el nombre de Raúl Córdova Alvarado en el frontis del Centro
Educativo 32226 de Huallanca.
Por: Ernesto Trujillo Amado
